domingo, 5 de junio de 2011

“A esta casa le sobran candidatos”: otro hilo en la operación contra las Madres, Cualquier semejanza con la realidad no es pura coincidencia…

Por Daniela Bambill
El discurso de despolitización que ha penetrado  a la sociedad globalmente, la figura del político como entidad perniciosa y oscura, que solo busca su propio beneficio, contrapuesta con periodistas inmaculados portadores de la verdad reveladora que protege a los pueblos del avance de los impíos y la aparición de organizaciones no gubernamentales que se conforman a la luz de la filantropía más pura han sido las herramientas de dominación en territorios en los cuales una invasión bélica dejaría explicitada la verdadera intención colonizadora del imperio, disfrazada de defensa de la democracia tal y como la entienden ellos.
La profundización del proyecto político que unifica a Latinoamérica a través de gobiernos profundamente consustanciados con sus pueblos,  la  firme determinación de dar vuelta la página a una historia de injusticia social que ha subsumido a los habitantes en la pobreza económica y cultural propicia para el sojuzgamiento indefinido ha descubierto las caras y las redes de relación  que se mantenían ocultas.
Hace pocos días ha aparecido en la Plaza de Mayo una casa  suspendida en el aire con el correspondiente rebote periodístico, en apariencia una ONG que movida por el amor al prójimo construye viviendas  en dieciocho países de América Latina, la organización “Un techo para mi país”, lleva según Agustín Algorta, su presidente 72 viviendas construidas con el apoyo de empresas privadas y fundaciones como Pensar que ha aportado voluntarios y ayuda económica en la tarea altruista de regalar casas a los pobres. Coincidentemente con esta curiosa forma de concientización para “instalar en la agenda gubernamental” el déficit habitacional en la Argentina, los medios hegemónicos dan cobertura escandalosa al lamentable accionar de Shocklender en la Fundación de Madres de Plaza de Mayo,  que lleva construidas más de dos mil viviendas y tiene proyectadas otras 5 mil.
Solo serían datos objetivos en comparación si la obscenidad de la operación no  fuese tan torpemente evidente.
La Fundación Pensar forma parte de lo que Stella Calloni ha denominado telaraña de ONG ligadas a UnoAmérica, la NED y la USAID  financiadas y propiciadas por la CIA, en nuestro país está conformada por integrantes de Propuesta Republicana (PRO).
El curioso llamado de atención de una ONG, bajo el lema “A esta casa le sobran candidatos”  vuelve sobre la lógica de la política como enemigo principal de los pueblos, la pretendida  denuncia en el Congreso contra la Fundación Madres de Plaza de Mayo casi simultáneamente son la punta de iceberg  de un entramado mucho más elaborado en el proceso de desgaste a través del desprestigio mediático que pretende llevar a cabo la derecha totalitaria de Latinoamerica sobre los Gobiernos populares.
Y siguiendo esta línea de razonamiento podemos retrotraernos a unas semanas atrás, cuándo Hebe de Bonafini se presentó en la Feria del Libro de Buenos Aires y entregó en mano una carta al Presidente de la Fundación Libertad, Mario Vargas Llosa, la Fundación Libertad ha sido responsable ideológico del plan “concientización” de los productores rurales en Rosario, previo al “conflicto del campo” que no fue otra cosa que un intento de Golpe de Estado en 2008 contra el Gobierno de Cristina Fernandez. La carta de Hebe no tuvo reacción  ni respuesta aparente de parte de Vargas Llosa, el episodio quedó como anécdota mediática y pintoresca en medio de la polémica generada en función de la supuesta falta de libertad de prensa en la que vivimos los argentinos, según el monopolio y su resistencia a la democratización de los servicios de comunicación audiovisual.
Comenzar a identificar los nombres, el accionar y las relaciones establecidas por quienes en nombre de la democracia han cometido los atropellos más atroces contra los pueblos que pretenden dominar en función de los intereses  que mueven la economía mundial, es indispensable en la tarea libertaria definitiva de nuestros países.
Ellos establecieron históricamente que es lo  conveniente o no para las políticas regionales, mientras los gobernantes latinoamericanos fueron simples custodios vernáculos de su empresa imperialista, desde diferentes disfraces,  utilizando los mismos argumentos que constituyen las banderas que nosotros levantamos intentando vaciar de contenido semántico las consignas, de este modo “justicia social” por ejemplo, pasa a ser un enunciado válido en la consecución de la igualdad de oportunidades como en el desalojo violento de un predio en la Ciudad de Buenos Aires.
Recuperar la semántica, apropiarnos de nuestras banderas, dejar en evidencia al enemigo identificándolo, comprendiendo que más allá de hechos concretos existe un plan perfectamente orquestado que se va tejiendo sigilosamente, concientizar cotidianamente sobre el entramado real,  sobrevolando la idiotez crónica de Macri o la desquiciante perorata de Carrió, o la evidente improvisación de Alfonsín, entendiéndolos como títeres de  una escena montada, debería constituir nuestro accionar militante.
Los logros obtenidos no son definitivos, las conquistas sociales y políticas deben defenderse diariamente, ellos no descansan,  avanzan y ejecutan  evitar la gota que orada la piedra es nuestra tarea, perder la oportunidad histórica de liberación definitiva sería de una estupidez supina de nuestra parte.
Entender que la política excede la efervescencia coyuntural de las candidaturas locales y pensar  en términos políticos de largo plazo, profundizando el Modelo de País propuesto por Néstor Kirchner y encarnado hoy por la Presidenta de la Nación, implica comenzar a visualizar claramente el  tablero completo y esto indefectiblemente comprende los intereses foráneos de los que ya nos hablaba Evita. La historia parece circular, corregir el rumbo es responsabilidad de hombre y mujeres dispuestos a pensar una Patria en serio, excediendo las disputas por cargos en una lista o la ocupación de espacios de poder por el simple hecho de ocuparlos.  Cuándo la política se reduce a esto, el  Proyecto un Patria Libre, Justa y Soberana,  tiene fecha de vencimiento.

1 comentario:

Unknown dijo...

abriendo los ojos...claro como el agua Daniela

buena semana

Adal